No puedo imaginarme viviendo mi vida sin mi amado Dominic. Es cierto que todavía me siento un poco molesta por lo que me hizo, pero nada de ese dolor y sufrimiento ha sido lo suficiente como para perder el amor que siento por él. La relación entre Dominic y yo ha sido más allá que una simple llama ardiente de pasión. Hemos compartido momentos inolvidables, reímos, lloramos, y seguimos juntos después de muchos altibajos. Ambos somos conscientes de que no somos perfectos, hemos cometido algunos errores. Sin embargo, a pesar de nuestras imperfecciones, nos amamos profundamente. Él abre los ojos y me mira, sonríe y aprieta mi mano con fuerza. —Estás aquí —susurra con voz débil. Asiento y siento un nudo en mi garganta al verlo allí. —Pensé que te había perdido —digo mientras sus dedos ac