[MICHAEL]
Al día siguiente: 15 de diciembre
Anoche he entendido que no me dejo ver a mi hijo por que su hermano estaba allí. Puedo entenderlo todo, pero no por eso dejare de insistir en formar parte de la vida de Bruno. He llorado más de lo que podía por culpa de mis propios errores, pero ya está, ya no puedo hacer nada más que intentar corregir lo que se pueda, así como lo es pegar los trozos rotos de un jarrón; no quedará igual, pero al menos se podrá ver un poco de lo que era ese adorno.
Es muy temprano, pero no quiero que me diga que está ocupada, o que se tiene que ir, quiero ver a mi hijo sin excusas. Golpeo la puerta con fuerza, quizás más de la necesaria, y espero pacientemente.
—¡Sabri, te he dicho que a las nueve!— La escucho gritar del otro lado.
Cuando abre la puerta, no
