(Narra Dante Weiss) ―Annie por favor…Aun podemos cambiar de idea. ― Le rogué pero ya era demasiado tarde. ― Tú estuviste de acuerdo conmigo. ― Si, pero yo no me imaginé esto ― Señalé mi maldito disfraz y luego el de ella. ― cuando tú dijiste que irías de conejita. Annie me había dicho que si quería podíamos ir combinados en pareja para la fiesta. Ella dijo, “yo iré de conejita”. Y claramente yo me imaginé otra cosa. Annie llevaba una pijama de conejo, hasta tría el gorro con orejas. Era un conejo blanco y se veía linda, pero en mi mente yo la veía más sexy que ninguna. Fui jodidamente engañado. ― Yo si te imaginé así. ― Me afirmó y se puso de puntillas para colocarme el gorro. Yo también estaba usando una de esas horribles pijamas holgadas, la mía era de un lobo café. Hubiera pr