Brittainy Stewart «Podría acostumbrarme a esto», pienso, ocultando mi sonrisa. No a la parte del frío, tampoco a la que incluye el miedo por haber terminado en un lugar horrible, más bien, a la que tiene que ver con unos brazos fuertes y un aliento caliente. Un evento revolucionario llamado Mason. La hora de espera pasa más rápido de lo que esperaba. En algún momento me digo que no debería pensar en lo cómoda que estoy a pesar del frío y por ello, pongo toda mi concentración en no moverme demasiado, en respirar lo más tranquilamente posible, para evitar roces extras que me ericen los vellos y él sea capaz de sentir aun con toda la ropa de frío puesta. Evitar que él sienta en mí lo que yo siento en él: los latidos acelerados de su corazón. Latidos descontrolados, agitados, que me brin