Abril.
Supe que había perdido cuando Ryan comenzó a acariciar mi cuello y continuo trazando la línea hacia mi pecho. Gemí, sujetando sus brazos.
Cayendo rápido en el placer de sentir como su lengua jugaba con mi pezón.
Luché por arrancar su remera, pero poco podría hacer contra él. Me arquee mientras me atormentaba, no podía con tantas sensaciones.
Sus dedos comenzaron a descender, trazaba con cuidado la superficie aún plana de mi abdomen, me instaba a abrir mis piernas.
No supe en que momento me quito la ropa, estaba perdida en pensamientos, emociones y tantos sentimientos como para explicarlo.
Sus dedos comenzaron a deslizarse entre mis muslos abiertos, era un toque suave, como si intentara atesorar el momento.
No pude evitar el grito ahogado que escapo de mi boca cuando sus de
