Robert -Así que, compañera ¿Eh?- suspiré, sabía que él no tardaría en preguntar. -Compañera- repetí con una sonrisa. No podía ignorar la creciente felicidad extenderse en mi pecho. A pesar de las circunstancias que la habían traído a mi, era mía y estaba completamente dispuesto a hacer mi reclamo cuanto antes. No iba a permitir que alguien la dañara, así tuviera que encerrarla y buscar al maldito de Kellogg yo mismo. Lo acabaría, no importaba lo que debía pagar luego. -¿En qué piensas? Tienes una mirada algo asesina ahora mismo.- miré a Michael, quien seguramente ya sabia lo que cruzaba por mi mente. ¿Por qué demonios no podíamos encontrar a nuestras compañeras sin tanto drama? Jack, encontró a Megan siendo acosada por un ex hombre lobo. Ryan, debió convencer y conquistar