Alexa — ¿Estas bien? –pregunta con preocupación, asiento, aunque la verdad mi vista se ha nublado y el dolor de cabeza empieza a esparcirse con rapidez, Daryl niega irritado sin despegarme de su firme cuerpo — ¿Todo bien? –pregunta el Sr. Pato acercándose a nosotros —No, Alexa no se siente bien, la llevare a descansar – dice Daryl, el Sr. Pato asiente y yo lo miro con vergüenza —Está bien, cualquier cosa me llamas – dice el Sr. Pato, Daryl asiente y yo le sonrío al Sr. Pato —Gracias, y lo siento – digo con timidez, el Sr. Pato me mira con amabilidad y me toma la mano —No te preocupes, gracias a ti por venir, cuídate mucho –dice el Sr. Pato con gentileza, asiento mientras Daryl camina conmigo a la salida del lujoso restaurante. Llegamos a su coche, abre la perta para mí y subo, no mi