Cuando entro a mi oficina estoy furiosa, lanzo mi bolso al otro lado de la oficina. ¿Por qué se molestó? Es mi puto trabajo. - ¡MALDICIÓN! – gritó furiosa, por esto no me interesaba una maldita relación, es una distracción, te quita la tranquilidad y te hace una mierda. - ¿pero qué demonios está sucediendo? – pregunta Romeo entrando a mi oficina, pero estoy tan furiosa que tiro todo lo que está en mi escritorio. – cálmate Annika – viene hasta mi - ¿Qué sucede? - Sucede que Ares es un imbécil – digo caminando fuera de la oficina hacia la azotea, necesito respirar. Subo rápidamente hasta que siento el aire golpear mi rostro mientras observo la ciudad. - ¿podemos hablar? – dice mi primo llegando a mi lado. - ¿Por qué? ¿Por