ALEJANDRO Entro a la habitación donde el señor Roberto descansa, lo miro con varios cables pegados a su pecho y una mascara de oxigeno en su rostro, me acerco, tiene los ojos cerrados, seguramente ver al padre de Sofía le causo esto. – Alejandro – dice con dificultad y abre los ojos, extiende su mano y la tomo – No haga esfuerzo señor Roberto – digo y el oprime mi mano con fuerza, se quita el oxigeno del rostro y me mira – Necesito, necesito que me digas – dice agitado, lo trato de calmar, pero se que esta alterado – Don Roberto tranquilo, necesito que este tranquilo por favor, si se pone mal de nuevo Sofía no lo va a soportar, nani estaba muy angustiada y su hija igual, todos lo queremos sano así que por favor trate de calmarse – digo y el asiente, suspira pesadamente y comienza a re