*Marceau* Anneli respondió a mi pregunta abriendo sus piernas para mí mientras yo le chupaba las tetas. Retirando mis labios, me moví más abajo y miré su coño. Abierto, rosado, hinchado, chorreando y delicioso. Su olor llenó mis fosas nasales y el deseo de lamer ese dulce es sorprendentemente fuerte. Volví a mirarla a la cara y me incliné más cerca de ella. No quería perderme ningún cambio de expresión en ella. Mis dedos bailaron a lo largo de la suave piel de la parte interna de su muslo mientras observaba cómo sus pupilas se dilataban y su boca se abría mientras su respiración se aceleraba. Mi mano rozó el triángulo limpio y suave de cabello rubio. Ella apretó los ojos cuando toqué su clítoris. Estaba congestionado y demostraba que estaba tan excitada como yo


