Cuando despierto el sábado por la mañana, no puedo evitar retorcerme por culpa de un dolor excesivo en mi bajo vientre.
Me dirijo al baño a duras penas y me encuentro con el terrible primer día de menstruación. Putos todos. ¡Maldito que arruina vacaciones! Odio ser mujer.
Gruño y vuelvo a mi habitación para buscar las toallitas y un cambio de ropa. Me doy una ducha tibia para intentar relajarme, pero tengo arcadas y dolor de panza. Maldita sea.
Siempre sufro cuando mi regla llega, sobre todo el primer día. No puedo salir a ningún lado, me siento descompuesta, ni siquiera puedo moverme de la cama y usualmente me la paso durmiendo por el cansancio que me ataca. Fui al médico para ver si es alguna clase de trastorno, pero no, simplemente es mi cuerpo que me odia y me hace sufrir. Otros
