Había escuchado muchas cosas acerca del amor después de haber perdido a la persona que era parte de tu vida, pero nunca llegas a asumir la magnitud de lo que significa hasta que te ocurre a ti. En mi caso, me había cerrado a todas las posibilidades de ser feliz, pero la vida tuvo otros planes.
La culpa fue encontrando alivio, y los años fueron pasando junto a la mujer que le volvió a dar sentido a todo. Vega y yo no solo llegamos a ser un matrimonio lleno de comprensión y amor. También llegamos a enseñarles a nuestros hijos lo importante que es vivir la vida un día a la vez, y es que si, tuvimos la dicha de poder tener un bebé más, uno que llego cuando menos lo esperábamos, pero que nos hizo extremadamente felices. Aarón, tal y como lo dice su nombre, fue un milagro de Dios, uno que nos h
