Me dejaron una madrugada en la calle con los ojos vendados. El lugar estaba vacío, dejaron mis manos libres para que pudiera quitarme el costal de la cabeza. Estaba tan asustada, que no pude evitar llorar. Por qué cada vez que intento hacer algo bien, ¿Todo va contra mí? ¿Por qué la vida sigue jodiéndome de la misma forma una y otra vez? ¿Qué he hecho mal? ¿Cuál es mi karma? Trato de levantarme del suelo, pero tropiezo con mis propios pies, estoy débil. No tengo mi celular, no hay personas cercas, todo está cerrado. Necesito encontrar a alguien para hacer una llamada. —¿Hola? ¿Hay alguien? Silencio. —¡AYUDA! ¿ALGUIEN PUEDE AYUDARME? No puedo mentir, en decir, que la verdad me sentí como una mierda. Estaba perdida. Solo quería morir en ese instante, desaparecer. ¿Hubiera sido mejor