A la mañana siguiente… Abrí los ojos con lentitud y tardé unos segundos en despertar del todo, miré a mi lado y ahí estaba Kang, durmiendo plácidamente, lo de anoche no había sido un sueño, había estado con mi jefe, ya éramos adultos, no había razón para volverme loca, él era hombre y yo mujer, solo pasó, ambos quisimos, no había razón para alarmarse tanto esta vez. Me levanté de la cama con lentitud y fui a ponerme una camisa y un pantalón, necesitaba ir al baño. Pero apenas llegué a la puerta, lo escuché hablar. —¿A dónde vas?. Me giré para verlo, él tenían los ojos cerrados y no se había movido ni un poco. —Al baño— Respondí. Salí a toda prisa y corrí al baño. ¿Ahora que debía de hacer?, la primera vez que estuve con él, pude decir que fue culpa del alcohol, pero ahora…¿A quien cu