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1717 Palabras
Hunter Subo a mi habitación, nuestra habitación desde ahora, con ella aun dormida en mis brazos. No puedo evitar la felicidad en mi, la encontré, por fin esta junto a mi. Miro su rostro, no me cansaría de verlo. Al llegar a la habitación la acuesto en la cama y me siento a su lado. — No los dejare llegar a ti mi luna, prometo protegerte de quien sea. — Hago la promesa observándola dormir. Estoy tan concentrado en mi luna que no escucho que abren la puerta y entran. —Es muy bonita hijo, no imaginas la felicidad que siento al saber que la has encontrado. Pero ¿qué le ha sucedido?—pregunta mi madre, haciéndome quitar la vista de Crystal para concentrarme en ella. — Es demasiado hermosa mamá, solo puedo agradecer a luna haberla encontrado. Y gracias a la diosa no le ha sucedido nada grave, solo esta cansada— respondo devolviendo mi vista a Crystal que empieza a removerse. Sus ojos comienzan a temblar y de golpe se sienta en la cama, mira todo hasta centrarse en mi —No fue un sueño ¿ verdad? ¿Ellos en verdad me traicionaron?— Veo como sus ojos comienzan a llenarse de lágrimas. —Tranquila mi luna, se que es doloroso, pero aquí te protegeremos— intento calmarla, mientras lagrimas siguen rodando por su rostro. —Hola pequeña, mi nombre es Elena soy la madre de Hunter, es un placer conocerte —mi madre se acerca con una sonrisa compasiva en su rostro. —Discúlpeme señora Elena debo parecerle un espanto, es solo— Crystal cubre su rostro con sus manos antes de volver a mirar a mi madre- no se como reaccionar. Son muchas cosas. — Tranquila, lo malo siempre pasa, no durara por siempre. Y por favor nada de señora, solo Elena. Ahora somos familia, eres la pareja de mi bebé— dice mi madre haciéndome sentir incomodo y sonreír a Crystal. — Eso es pequeña, te ves muy hermosa cuando sonríes. — Si lo hace mamá, demasiado hermosa—digo impulsivamente, haciendo a Crystal mirarme en un tono rojo En ese momento golpean la puerta y mi padre entra, mirándonos a los tres. —Alfa Samuel, han pasado años desde que lo vi por ultima vez—Crystal se muestra feliz al ver a mi padre —¿Nos conocemos pequeña?—pregunta mi padre intrigado —Lo siento, han pasado años como he dicho, he cambiado un poco, pero usted sigue igual. Mi padre solía decir que era uno de sus mas confiables amigos, crecí viéndolo en las reuniones que se organizaban en la manada. Soy Crystal Wallace, de verdad me alegra volver a verlo. — Crystal aún tiene lágrimas en sus ojos, pero lo que más me sorprende es ver lágrimas en los ojos de mi padre — Crystal, no puedo creerlo. Es decir, te dábamos por muerta junto a todos los demás. Por la diosa pequeña, no imaginas lo feliz que me siento al saber que aun vives.— mi padre se acerco a mi madre, quien estaba sentada junto a Crystal — ¿Donde te has ocultado? Por favor dime que ellos no saben que sigues con vida—le pide con preocupación. — Lamento decirle que si lo saben, Alice ha reclutado un buen número de alfas para buscarme, incluso... incluso las personas con quienes viví en el mundo humano me traicionaron, eran mi familia y no dudaron en entregarme a ellos— se nota cuando habla la tristeza que tiñe su voz —Tranquila mi luna, no llegaran a ti. Ya te lo he dicho, te protegeré, eres mía—intento transmitirle todo lo que siento por ella. —Has visto de lo que son capaces... se que quieres que sea tu luna o perderás el puesto, pero eso declararía una guerra para la manada, no quiero ser responsable de más muertes, ya he perdido mi manada, mi familia, ¿por qué sacrificar también la tuya?— me lo dice tomando mi mano en la suya — Entiende Crystal, pase años buscándote no creas lo que Víctor dijo. Eres mi luna, esta es tu manada también, no puedo ni quiero perderte. No puedo, no ahora que por fin te encontré— apoyo mi frente en la suya —Escúchalo Crystal, no es por el puesto que te ha buscado, paso años de manada en manada buscándote. No te negare que el ultimátum existe, pero no es por eso que estas aquí. Mi hijo siempre te ha necesitado, dale la oportunidad de conocerte. —Mi madre interviene a mi favor. —Seño… Perdón Elena, no quiero ponerlos en peligro. Les pediré quedarme, puesto que mañana es mi transformación, pero luego no puedo sino irme —Crystal voltea a verme— Has visto lo que sucedió hoy ¿Crees que se darán por vencidos ahora que vieron el poder? Lo necesitan, me necesitan y no pienso ceder sin luchar Mi padre nos mira con curiosidad —¿ Poder? Crystal, ¿todo lo que decían era verdad? ¿Te quieren por el poder de la diosa luna? — Si Alfa Samuel, todo es por ello. Se que mi padre le habrá comentado, confiaba mucho en usted. Ellos buscan mas poder del que tienen y no para usarlo en el bien, no puedo permitirlo, moriré antes de entregárselos.— Gruño al escuchar eso — No te dejare sola en esta pelea Crystal, eres mi compañera, no me importa que poder tengas solo te quiero junto a mi. —Eres mi compañero Hunter, no puedo reconocerte aun, pero lo se. Así como tu quieres protegerme, yo quiero hacerlo contigo ¿Entiendes eso? Aún no te reconozco y ya quiero protegerte, ¿imaginas cuando el lazo se forje? —No te dejare ir Crystal, me obligaras a seguirte. Aquí estarás protegida, cuidada y amada—afirmo mirándola— Te necesito y me rehusó a alejarme de ti porque codiciosos malnacidos intentar adueñarse de ti—La veo suspirar derrotada — Hunter, también te necesito, mi única ilusión era encontrarte luego de mi transformación. Temía no poder hacerlo al estar lejos de cada manada. No imaginas como me sentí al saber que eras tu… Es por eso que quiero protegerte, eres todo lo que me queda, lo único que no esta corrompido. No puedo dejar que lleguen a ti— mira con duda antes de tocar mi rostro—Eres perfecto— la veo sonrojarse y se que no quiso decirlo en voz alta —Tu tampoco estas nada mal cariño—sonrió al ver como mi comentario logro su propósito —Crystal, mi hijo es tu compañero, no pueden alejarse. No los dejaremos acercarse a ti, ya perdí a mis amigos por esa ambición, no perderé a mi familia y eso eres para nosotros. — Dice mi padre ayudando a mi madre a ponerse de pie. —Alfa Samuel haré un intento, pero no puedo prometer que no haré lo conveniente llegado el momento —Mi luna gracias por aceptar, ahora descansa—beso su frente antes de mirar a mi padre— necesitamos hablar, te esperare en el despacho, llama a Jack padre—digo antes de verlos salir de la habitación. —¿ Puedes… Puedes quedarte conmigo un poco más?— su voz suena pequeña, temblorosa. Me recuesto abrazándola —Toda la vida mi luna, incluso si intentas alejarme, no podre estar lejos de ti. Sus ojos se van cerrando mientras juego con su pelo. Cuando noto que se ha dormido, salgo a hablar con mi padre y mi beta. —¡Felicidades hermano! Me han dicho que la encontraste ¿ Cómo es ella? —pregunta Marck al verme ingresar en la oficina —¿Que puedo decirte?, es hermosa. La conocerás en la cena su nombre es Crystal y mañana será su transformación— respondo pensando en que ella mañana me reconocerá —Que va hermanito, tu cara de tonto me lo dice todo. Estoy feliz por ti, no solo por tu compañera, también porque conservaras el puesto de alfa. Ya quiero ver la cara de todos quienes te desafiaron cuando lo sepan. —Creo que ya lo saben, pero no me preocupa que quieran mi puesto Marck… Me preocupa que quieran a mi luna—eso si tortura mi mente — ¿A ella? Hermano se que sin ella no serás el alfa, pero no creo traten de arrebatártela — me mira como si hubiera perdido un tornillo. -Ya lo han intentado hijo-responde mi padre antes de mirarme-Jack me ha puesto al tanto. Hunter, ¿sabes que no será fácil verdad? Pero tampoco estoy dispuesto a que se la lleven… La protegeré como a mi propia hija, se lo debo a sus padres. —Gracias papá, no podría dejarla aunque quisiera. Sabes que abandonaría el titulo con tal que su seguridad este garantizada —Eso no pasara, ni tu renunciaras, ni ella estará en peligro —dice mi padre usando su voz de mando, algo que no hace desde que asumí. —¿Quieren explicarme que sucede?— cuestiona mi hermano —Marck mientras buscaba a mi luna llegue a "Cruz de plata", seria allí donde buscaría esta vez. Víctor se negaba a darme paso, hasta que llega un automóvil, dentro reconocí el olor, era mi luna. Cuando salió, tanto sus padres adoptivos como Víctor intentaron retenerla. Iba a suceder una masacre, solo éramos Jack y yo contra su manada, pero no iba a dejarla, si estamos aquí ahora es porque ella nos salvo— explico la situación recordando con odio a Víctor y su manada —¿Qué quieres decir con que los salvo? Eso es imposible, ni siquiera es una loba —Marck como te dice Hunter, ella nos salvo. Estábamos por ser atacados y ella nos mando a todos a volar por los aires, al levantarnos huimos de allí—explica Jack aun con cierto asombro —¿Es una loba o una bruja? Ningún lobo controla el aire, lo saben —Hijo, es una loba—dice mi padre junto a un suspiro—pero ella tiene un regalo de la luna. Creí que su padre exageraba el día que me lo dijo... tiempo después la manada fue totalmente masacrada, no sobrevivió nadie, o eso creí hasta hoy. En ella se esconde un gran poder y muchos lo quieren, ya lo han demostrado —No la tendrán— grito golpeando la mesa junto a mi—es MÍA y no se las daré jamas —Tranquilo hermanito, romperás otra mesa y mamá ya esta molesta con la anterior —Deja las bromas Marck, en este momento me siento completo. Mi vida esta arriba, en mi habitación y me tortura la idea que me la arrebaten—me hundo en el asiento —Nadie se la llevara, todos lucharemos, es nuestra luna, tu pareja— me dice Marck entendiendo el huracán de emociones en mi. Solo espero que en verdad podamos protegerla, lo daré todo de mi. 
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