38. Caballos

1227 Palabras

Hera Kade Acaricio con suavidad la cabeza de mi caballo, sintiendo el calor que emana de su piel bajo el pelaje brillante. Su respiración es tranquila, acompasada, y ese ritmo constante logra calmar un poco el torbellino que tengo en el pecho mientras espero a Alaric. La brisa agita ligeramente mi cabello y el de mi montura, como si el viento mismo presintiera que algo está por suceder. — ¿No sería mejor si los cinco compiten contra mí? — pregunto en voz alta, girando apenas la cabeza hacia mis demás destinados — ¿Temen que gane Alden? Mi tono es firme, con una mezcla de desafío y cansancio. Alden, como si mi comentario no tuviera peso alguno, sigue acariciando con obsesión el anillo de mi familia. Ese gesto constante, esa manía suya, me crispa los nervios. Verlo jugar con ese anillo es

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR