- ¡Qué rayos Dominic! – Zafir le contestó furioso en la llamada – Regrésale el teléfono a Fredercik – Dominic sonrió y negó. - No le voy a regresar nada a Frederick hasta que vengas aquí. - Te voy a recordar que tú no puedes mandarme y mucho menos en mi manada Dominic. - Claro que puedo hacerlo Zafir – Frederick y yo nos miramos incómodos al escucharlos hablar de esa forma – Te quiero ver en diez minutos aquí. - ¡Dominic te…! – Mi mate lo interrumpió. - Diez minutos, ni un minuto más – Le colgó sin esperar que le contestara y le regresó su celular a Frederick. - ¿Qué rayos fue lo que pasó? ¿Y por qué te dice Dominic? – Frederick frunció el ceño. - No te preocupes – Mi mate se encogió de hombros restándole importancia – Ahora lo