Había pasado media hora y los tres ya se habían acomodado y la reunión estaba en marcha, de hecho, ya se había discutido gran parte del problema, si no es que estaba la reunión acercándose ya a su fin, sin embargo, Isabella no podía dejar de lanzar miradas de soslayo en dirección a Arvan. Esto, por supuesto, no pasó desapercibido para Travis, lo que provocó que su agarre en el borde del brazo de su silla se tensara, para tratar de controlar sus nervios. —…así que, para que la paz reine y todo vuelva a ser como antes, tanto en la industria de los negocios como en la sociedad, he decidido intervenir y sugerir una propuesta algo…complicada —los ojos de Arvan recorrieron las figuras de ambos CEOs de semblante serio, esta vez deteniéndose más en Isabella antes de apartar la mirada. —¿Y cuál