[RENZO] Cuatro días después: 30 de marzo Tengo que decir que en esta ocasión si estoy nervioso, ir a una fiesta con sus amigas es algo que no sé cómo pueda salir, pero si queremos que esto funcione como hasta ahora, los dos sabemos que tendremos que convivir con el mundo del otro, y para ella sus amigas son importantes. Miro la hora en mi reloj de muñeca, y respiro hondo —¡Anya! Preciosa, que se nos va a hacer tarde— Le digo lo suficientemente alto para que me escuche desde la habitación. —¡Ya estoy!— Oigo que responde y al sentir el sonido de sus tacones, levanto la vista. Me quedo idiotizado al verla, y es que trae un cortísimo vestido de lentejuelas color cobre que le queda de infarto —¿Te gusta?— Me pregunta y voltea para dejarme ver que toda su espalda esta descubierta hasta dónde