POV: Chelsea. Mi pecho quema cuando siento que el aire me falta, que no puedo respirar. Mi garganta duele, desgarrada, y la yema de mis dedos, se siente entumecida de tanto presionarlos contra Demian. Quiero gritar, pero no sale nada. Porque, ¿qué dices cuando entiendes el sacrificio?, ¿cuando sabes que la vida de una inocente está en riesgo y este es el único camino?, ¿cuando los sentimientos están encontrados y no quieres conformarte con esa única opción? Aun así, eso no quita que me duela como nada antes dolió. Ni siquiera mi vida solitaria de mierda, la tortura que casi me lleva para siempre. Nada es tan doloroso como su estoicismo, que me está matando. Como la forma en que acepta todo esto sin luchar, sin oponer resistencia. Sus palabras no ayudan. Solo me desconciertan, me hacen