-Tenía 6 años cuando comenzó todo. Un día estaba jugando felizmente por mi casa cuando boté un jarrón, papá se acercó hacia mi y se molesto mucho, ese jarrón era de su abuela. Al percatarse de que lo había roto vino hacia mi y me dio un fuertemente puñetazo en la cara, haciendo que se me cayeran dos dientes. Después los golpes fueron constantes. Paso de solo golpearme una vez al día, hasta golpearme cinco veces. Mamá no hacía nada para ayudarme, ella le tenía miedo a mi padre. Cuando tenía 12 me acuerdo que entre un día a la habitación de mi padre y ahí lo supe todo. El golpeaba y violaba a mi madre por un supuesto engaño de parte de ella. Por eso mamá le tenía tanto miedo. A los 14 mamá vino hacia mi y empezó a hablarme. Decía que me quería mucho y que la perdonará por no poder ayudarme