Me arrepiento de haber enviado ese mensaje, pero no porque no quiera contestarle, si no por el hecho de que no podré hacerlo. Así que vuelvo a meter el móvil dentro de la bolsa interior de mi saco y me pongo frente a la puerta junto con Vivianne. Se abre inmediatamente. ―Welcome, Mr. Carter will be here in a minute.― Nos dice el mayordomo y ambos entramos al elegante piso. Vivianne entra primero y yo lo hago detrás un poco más ansioso de lo normal, no sé si por el mensaje o porque de pronto me empezará un ataque de pánico ya que son tan espontáneos que no sé cuando llegarán. Respiro profundo y trato de tranquilizarme. Pasamos a la sala donde nos instalamos en el sofá mientras vemos por el hermoso ventanal Central Park haciendo a Vivianne sonreír. ―Nunca había estado en Nueva York.