Moríns -Unas semanas después- Todo con Sila ha ido más que perfecto, todo, y ahora en la segunda revisión de su embarazo mejor. Nuestro bebé está sano, fuerte y crece cada día más en el vientre de su madre, quién lo trata con todo el amor y cariño del mundo. Tanto ella como yo hemos dejado atrás los reclamos y cosas del pasado, y ahora simplemente nos enfocamos en el presente como lo hemos platicado, por lo que el plantón en el altar y el intento de quitarse la vida, han quedado lejos de nuestra situación actual. Sila sigue yendo a terapia dos veces al mes, trabajando en el hospital y yo, sigo trabajando en la fundación, terminando los proyectos que Manuel dejó pendientes y haciendo espacio a los nuevos y cumpliendo con mis labores de presidente. También, he comenzado a unirme más a