El sabor de su boca se ha quedado impregnado en la mía durante todo el fin de semana, moría por volverla a ver, por besarla una vez más, por decirle todas estás palabras que me llevo callando durante tanto tiempo, pero sé que debo ir paso a paso, que no debo presionarla y que también le he prometido ir a su ritmo y debo cumplírselo. Por otra parte, he estado dándole vueltas a lo que ella ha planteado. No me agrada en absoluto la idea de que ella sea quien se meta directamente con ese tipo, pero tampoco puedo prohibírselo ¿o sí? Supongo que lo único que puedo hacer es apoyarla e intentar que no le pase nada… Termino de vestirme, busco mi celular, mi billetera y una vez que tengo todo, salgo de la casa, me subo al auto y emprendo camino hacia la oficina para dar comienzo a esta nueva seman