Alaric Cualquiera que la viera en este momento sabría sin lugar a dudas que está sufriendo un ataque de pánico. Sus dedos tiemblan sobre sus oídos, hay pequeñas perlas sobre su frente, la respiración es demasiado agitada. Odio verla así. ¿A esto se refería su abuela? ¿Por qué un adulto le tendría miedo a las tormentas? Esta mujer es todo un enigma. Me agacho a su lado esperando que conteste. - Si - Susurra dejando escapar el aire. Asiento pensando que hacer. No podemos salir de aquí hasta que reestablezcan la electricidad y no tengo el poder para hacer que una tormenta se aleje... - Vale, mírame Eda - Espero paciente hasta que sus párpados se abren y vuelvo a ver esos enormes ojos azules - Voy a taparte los oídos mientras te quitas la chaqueta ¿vale? Coloco mis manos sobre las