—¿Confías en que puedo lograrlo?—le susurro mientras aprieto ligeramente su brazo para llamar su atención, estar aquí por supuesto que me emociona y al mismo tiempo me hace sentir pequeña ante tal evento, que ni en más extrañas fantasías soñé con poder ver con mis propios ojos. Denua no me responde enseguida, así que me vuelvo hacia él, hallando en su rostro cierto desconcierto, así que enseguida pienso que tal vez mi pregunta le ha causado cierta inquietud porque me mira de forma extraña, como si temiera que no tengo la suficiente confianza para lograr nuestro cometido y aunque claramente estoy nerviosa, no pretendo fallar.
— Por supuesto, ¿Tú no?—musita Denua alzando la ceja, juzgando mi pregunta. Supongo que ha sido una tontería de mi parte hacer ese tipo de cuestionamiento justo en es
