31 de Diciembre, 2017 Se ve tan guapo y relajado dormido a mi lado, que realmente no quiero despertarlo. Intentando hacer el menor ruido posible, me levanto de la cama, voy al baño, y luego me coloco mi albornoz para salir de la habitación. Voy hacia la cocina y allí me encuentro a mi madre que como siempre es la primera en levantarse. -Buenos días má.- Digo sonriente y le abrazo como hace mucho no lo hacía. -Buenos días hija, ¿quieres un café?- Pregunta amablemente y niego. -Mejor un té. El café últimamente me ha provocado acidez.- Digo tímidamente y ella niega mientras esboza una enorme sonrisa. -Aun no me creo que vayas a ser madre. Me hubiese encantado saberlo desde el principio.- Me dice mientras que me prepara el té y yo me siente en el taburete que está al lado de donde estaba