[VALLE] Y aquí estamos de nuevo en su avión, pero esta vez rumbo a Argentina. Diego y yo hemos salido un poco tarde de la fiesta ayer en la noche, por lo que venimos cansados y con ganas de dormir todo el vuelo, aunque mis nervios y mi emoción pueden más que el sueño. Los asientos son espectaculares, el espacio mucho más. De pronto veo las ventajas de viajar en un avión privado, la comodidad y sobre todo tener una habitación para nosotros si es que queremos descansar, él se comporta con naturalidad y yo solo podía aferrarme a su mano mientras caminábamos viendo lo exquisito que es el aeropuerto privado. Al entrar al avión me siento mejor, más cómoda y feliz — ¿Todo bien amor? — me dice mientras me abrocho el cinturón. — Solamente un poco nervios, pero nada que 5 whiskies me puedan qui