María
— Bueno días – dice Bruno y entra a la cocina, Felipa se pone seria y yo lo miro irritada
— Buenos días joven Bruno –dice Felipa con sequedad, él me mira de arriba abajo con lujuria, es un idiota
— ¿Quiere algo de desayunar? – le pregunta Felipa, Bruno se sienta a mi lado y sonríe
— No, ve a mi habitación y arréglala – dice con tono mandón, Felipa asiente y sale de la cocina, me levanto para irme, pero me toma del brazo con fuerza y me pega a su cuerpo
— Suéltame –digo y lo miro con furia mientras él sonríe con perversidad
— ¿María por qué te caigo tan mal?, yo solo quiero que seamos amiguitos – dice divertido
— Suéltame, tú y yo nunca seremos nada – digo irritada y me suelto de su agarre
— Yo soy mucho mejor que Max, ni te imaginas lo que te puedo hacer gozar – dice con arro
