[María] Estoy en mi cama recordando la fría mirada de Max cuando vio a Elías, no puede estar celoso, él y yo no somos nada, aunque yo lo amo con locura, él sigue embobado con la bruja de su ex, debe dejar de importarme lo que piense o sienta, debo pensar en mí, Elías es muy lindo y es más que obvio que está interesado en mí, yo quisiera corresponderle, pero no puedo, porque sigo enamorada de Max. Estoy en la oficina atiborrada de trabajo, creo que mi jefa piensa que soy un robot o algo así, tengo una enorme pila de documentos y ella solo se lima las uñas. — María, llévale estos reportes a Max – dice mi jefa y mi corazón se aloca al escuchar su nombre, asiento débilmente y tomo los reportes, entro al elevador y siento las manos sudarme sin cesar, debo controlar mi desbocado corazón, no