[KIAN] Una semana después: 27 de febrero Cuán difícil se hace estar cada día cerca de ella y vivir esta lucha interna constantemente. Por un lado, siento que todas las dudas que ella misma planteó acerca de quién es el padre del bebé se han disipado… al menos de mi parte. Sinceramente, ya no me importa si es de Mariano o mío. Solo quiero estar con ella y ser el padre de ese bebé. De verdad, solo quiero que ese embarazo llegue a término y que juntos criemos a ese pequeñín —o pequeñina— que viene en camino. Y es que sí… ahora lo sé. Me muero de ganas de ser papá. Y luego, por otro lado, comienzo a sentir un anhelo inmenso por derrumbar los muros que Caeli y yo construimos hace apenas unos días. La veo cada día, recostada en su cama, guardando reposo tal como el médico lo indicó, y me mue

