El olor a hospital se hace presente en mis fosas nasales, detesto ese olor a antiséptico. Pauline acaricia mi vientre por mi parte yo solo sonrio levemente. Mi vista se fija en el hombre que se acerca a nosotros. Fernando extiende sus brazos a lo cuál Pauline entiende, ella lo abraza, ambos sonríen. -Cada vez te veo más feliz y hermosa. -Mi vida a cambiado bastantes desde que me case con Jhon. -Eso se nota-comenta para acercarce a mi y abrazarme también. -Hola viejo. -No estoy tan viejo-comenta entre risas.- Quería comentarles algo. -¿Sucede algo?-pregunta mi esposa nerviosa. -Mañana darán de alta a mi hermano. Y las niñeras ya se presentaron. Ya no es necesario que se queden a cuidar a los niños. Tienen el día libre para hacer lo que quieran. -Que bueno que las niñeras ya