Curtis Wood. El viaje de Italia a Las Vegas fue una completa locura. Creo que jamás en la vida he estado al borde de mi paciencia como esta noche que fue eterna. Y más, cuando me di cuenta que los planes de Angélica eran estar lejos de mí. Escapar de mis manos, de mi presencia y de todo lo que pudiera rodearme a mí. Por supuesto, es algo que no podía ni puedo permitir. Porque Angélica es lo que yo quiero para mí. Mis planes antes de este corre corre, la incluían a ella vestida de blanco y yendo hacia mí en en altar. La perra de Ginevra no va a joderme esto por sus absurdas ambiciones. Porque por ella fue que todo se salió de control cuando yo estaba lejos. Y no, no estoy dispuesto a abandonar mis planes. Aunque la chica de los Bianchi hizo bien su trabajo, paso a paso, en el trayect