Olivia estaba en sus aposentos tratando de entender todo lo que había ocurrido, paso tan rápido, que ahora que se encontraba sola, no dejaba de preguntarse si, ¿Había echo lo correcto?. Casarse con un Nórdico, el rey de Inglaterra estaba aliado con él, así que tal vez no sería juzgada tan severamente, los Vikingos eran conocidos por su insaciable deseo de riquezas, venían a tierras inglesas cada tanto a saquear todo lo que podían, mataba*n mujeres y niñ*os, eran como una plaga Incapaz de contener. Se llevaban lo que querían y no había nada que se pudiera hacer al respecto. Su cuerpo se estremeció cuando las puertas de su habitación se abrieron, Harald entró y la miró, se acercó a ella y ella estaba por pedir piedad, pero él solo le dio un beso en la frente. —Duerme bien futura esposa m