Zoe había dado a luz una hermosa niña, mientras que Bett había tenido un niño mucho antes, al cual llamaron Gabriel. A nuestra pequeña le llamamos Annie, ella era mucho menor que Gabriel, pero él era todo un caballerito con su prima, al igual que la hermosa Tania. Hoy era nuestra boda, mientras que mi padre seguía en un estado crítico, los hombres que consideraba su familia buscaron el modo de dividirse el dinero y cada sector que le correspondía a mi padre, por mi parte di la cara asegurando que no me metería en ninguno de sus negocios, tras firmar una gran cantidad de papeles y recibir varias amenazas más tarde, terminaron por creer en mí palabra. Junto con Zoe empezamos pequeñas empresas y fundaciones en busca de ayudar a jóvenes amenazados, abusados y a aquellos que no podían salir de