Adam estaba durmiendo cuando sintió que alguien le quitaba la manta con la que estaba tapado, él se quejó.
_ Tengo frío.
_ Adam despierta, te dije que debías irte temprano en la mañana, ¿Lo has olvidado?
Habló la madre Adam mientras lo obligaba a levantarse. Él miró la hora, eran las 6 de la mañana, le dijo.
_ Mamá, es demasiado temprano, déjame dormir un poco más.
Isabella le dio con la almohada y le dijo.
_ Levántate de una vez.
Adam se levantó medio dormido y le dijo.
_ Había olvidado la dulce manera que tienes de despertar a las personas.
_ Pues no lo hagas, ahora levántate.
_ Enseguida lo haré.
Cuando Adam se levantó Isabella le paso su chaqueta y lo saco casi arrastras de la casa y le dijo.
_ Vete y mucho cuidado con llegar tarde.
_ Jamas llegaria tarde el día de mi boda
