—¿No estuvo tan mal? o ¿sí? — Me pregunta cuando vamos bajando del micro junto al resto de los turistas que se registraron para esta actividad.
Niego con la cabeza —No, tu familia es un amor, aunque creo que no nos compraron el teatro de los amigos— Comento y sonreímos cómplices.
—Yo creo que no, sobretodo cuando les dije que iba a ir a Ushuaia con vos— Explica y lo miro confundida.
—No entiendo— Digo y lo sigo hasta llegar al tráiler donde están unos chicos entregando todo el equipo de kayak a cada una de las personas.
Veo a mi novio sonriéndose y en su mirada me encuentro un mar de dudas —Nunca fui con ninguna chica a encuentro de motoviajeros— Me confiesa y por alguna razón esto me hace sentir especial.
—Mira vos… es decir que con eso se cayo todo nuestro teatro— Bromeo.
Él encoj
