¿Qué quién me dió autorización? ¿Quién se cree que es? ¿Mi padre? Justo en este momento tengo emociones mezcladas, algunas son más fuertes que otras y la batalla interna que llevo hace días contra mi misma me tiene cansada. Adán Martell me cae mal, eso es un hecho. Debo quizás agradecer por haberme sacado del convento pero no el que me tiene presa a su lado en contra de mi voluntad. Tampoco puedo decir que me gusta su compañía por qué no hemos tenido un momento en el que podamos saber cosas sobre el otro y eso es una desventaja, además...siempre quiere estar metiendo sus dedos en mi y eso me provoca un sentimiento diferente al que se supone que debería sentir. Las olas del mar mojan mis pies y levanto la vista. Adán me excita, no lo voy a negar por qué para este punto ya no es un mald