—¡Es la niña más hermosa que he visto!—Canta mi mamá con una gran sonrisa. Oculto la diversión mientras veo como la arrulla. Aunque estoy cansada, me siento feliz. A mi lado, Liam ahoga un bostezo. No durmió en toda la noche al pendiente de Kaia. Fue paciente y algo torpe, pero se le perdona. Después de como la traté el día de ayer. —Es idéntica a ti—miro a mi madre. —No. Es igual a mi Liam—salta Rose de pie a su lado. —Pues, mi niña era así —Tiene los ojos de Liam. ¿No lo ve?—abro los ojos como platos. Mamá le da una mirada. —Bueno. Ya la tuviste mucho, ahora me toca a mí—Rose alarga los brazos y mi mamá se aparta. Kaia duerme ajena a todo el revuelo que está causando. Viste un mameluco rosa y luce una extravagante diadema que Abby trajo para ella. —Está dormida y, podría desp