ANET… ¿Qué acaba de decir? Todo a mi alrededor es completo silencio mientras que a mí me pitan los oídos. El hermano de Aodh me sostiene la mirada y en sus ojos puedo ver un brillo triunfante, como si acaba de ganar una guerra que jamás tendrá oportunidad de ganar. Al menos no conmigo como contrincante. Paso saliva preguntándome como es que lo sabe. ¿Cómo descubrió a mi pequeño cuervo? Una bruma roja comienza a nublarme la mente mientras que la rabia y el odio burbujean en mi pecho haciendo que auténtico fuego me recorra las venas. Sin embargo, mi expresión es neutra mientras me pongo de pie. - No sabes lo que acabas de hacer- advierto por que si Aodh le costó la vida saberlo su hermano conocerá el infierno por revelarlo. - ¿Acaso lo que dije es mentira? -