Conseguir un vuelo no fue nada sencillo, pero esta vez no podíamos ir en auto y tardar un día y medio. Tardamos una hora en por fin tener nuestros pasajes y dos horas y media llegar a mi propio infierno. Sabía en que hospital se encontraban, por lo que llegar allí tampoco fue tardío. Lo que si tardaban en llegar, eran las ganas de ver a mi familia nuevamente. Sé que mi padre esta mal, pero demonios, ellos me echaron sin importarles que rayos me sucedería. -¿Segura que te sientes bien girasol? Tendrías que estar descansando, debí ponerte un calmante para subir al avión y anoche estuviste ingresada. -estaba bastante cansada, pero quería saber que es lo que había sucedido. -Entremos, mientras más rápido terminemos esto, más rápido descansaré. -solo habíamos empacado dos mudas de ropa,