Megan: Si, sin duda la comida de hace rato tenía droga, que estúpida fui, ahora iba a morir envenenada, no podía moverme, estaba alucinando, aquella cosa era un...¿Oso?...no…yo había visto la película de “Van Helsing”, una de mis favoritas por cierto, pues esa cosa frente a mi, era igual que el hombre lobo de esa película, tenía un hocico de perro, solo que más largo y le salía mucha espuma y baba, como si tuviera rabia, y sus ojos eran rojos brillantes, parecía un poco erguido pero aún así debía de medir al menos dos metros y andaba en dos “piernas”, si así se les puede decir, tenia brazos como de los de un oso, solo que más delgados y largos, era muy peludo, un pelaje n***o y gris, era aterrador, y tenía un olor a…perro muerto, aún peor que eso, me tapé la nariz y traté de no hacer ruid