Capítulo 6.- El vínculo.

2971 Palabras
Alec: Odiaba los días calurosos, sentía que mi piel se quemaba, últimamente me ponía de mal humor muy fácilmente por cualquier cosa, no me gustaba ir al instituto, sentía que era una pérdida de tiempo, me alegraba que solo quedara un año más. —Escucharon los rumores, dicen que abrá una rebelión en el clan de los Black—dijo Mark, —¿Dónde escuchaste eso?— preguntó Caleb mientras revisaba su teléfono, —Mi padre me lo dijo— —Si mi padre también me lo dijo, el señor Black le pidió ayuda, no tiene descendientes y quieren remplazarlo, es débil— añadí, —¿Quién tomará el mando?— —Cualquier Alfa que lo reclame— Íbamos de camino al salón cuando miré a Frank peleando con una chica, Frank siempre se metía en problemas y tenía que estar bajo vigilancia, pero discutir con una chica, eso era algo nuevo. —Maldita perra…— Caleb y Mark se rieron de lo fácil que aquella joven derribó a Frank, ¿Quién era ella?, Había un olor en ella, un olor nuevo para mí, era un olor muy seductor que me hacía sentir inquieto, Frank iba a golpearla y me apresuré a detenerlo, sujeté su puño y Frank me miró como un perro regañado mira a su dueño después de portarse mal, miré a la joven que tenía los ojos cerrados esperando el puño de Frank, tenía un bonito rostro, se veía muy joven, no usaba nada de maquillaje y eso era algo raro de ver entre estás jóvenes, tenía una piel blanca y un cabello bonito con olor a fresas, sus labios rojos eran una tentación para mí, me sentía raro, —¿Por qué te comportas de ese modo?, Ella es una dama y no es su culpa que no te sepas defender— dije para calmar la situación, la joven abrió los ojos y me miró confundida, sus ojos eran de un color avellana claro, era una chica muy hermosa, No sé por qué pregunté si ella era una dama, pero se molestó y nos llamó estúpidos, creo que yo solo quería parecer gracioso, pero solo quedé como un grosero, y si, como un estúpido, Una compañera de ella la llamó ‘Megan’ su amiga me dijo algo pero no le puse atención, Megan era tan llamativa y fascinante, ya la había visto anteriormente, venía con el idiota de Mathew, no era como las demás jóvenes, ella era diferente, Señaló a Frank y dijo, —Tú no vuelvas a molestarme o te sacaré los ojos—después solo se marchó, —¿Quién es ella?, Y ¿Por qué la molestabas?—le pregunté a Frank, —Es la novia del idiota de Mathew y no la molestaba, quería conversar con ella y me golpeó… yo… estaba desprevenido— —Si claro—dijo Caleb y sonrió, —Es bonita, pero ya te odia, eres un idiota con las mujeres— —Yo solo quería conversar, ella se puso como loca— –Está bien, solo déjala en paz — Por alguna extraña razón no podía dejar de pensar en ella, su blanca piel, sus hermosos ojos, su delicado aroma, me estaba atormentando, y no me gustaba la sensación, ¿Acaso ella era mi mate?, pensé en Roxanne instantáneamente, y traté de concentrarme en las clases, la miraba en la cafetería a la hora del almuerzo, se sentaba con Lisa, sonreían todo el tiempo, hablaban muchas tonterías, ponía toda mi atención en sus conversaciones aunque no fueran de mi interés, durante la semana investigué sobre ella, tenía 18 años aunque parecía de 15, tenía un bonito cuerpo, estaba en primer año y me preguntaba ¿por qué?, ¿Había perdido años?, tal vez era muy tonta y los había reprobado, Vivía con sus padres, no tenía hermanos y se había mudado hacía poco, su padre la traía a la escuela y la llevaba, no era una chica rica, pero Mathew si, él le estaba pagando el instituto, no sabía que tipo de relación tenía con él, lo que sí sabía era que no eran novios, vivía en una casa de clase media, desde la calle podía ver su habitación, ella no cerraba las cortinas hasta que no se iba a la cama, La esperaba todos los días en el Segundo edificio y caminaba detrás de ella como un idiota, ¿Qué tenía ella?. En mi desesperación fui a la biblioteca a refugiarme lejos de ella pero no duró, estaba buscando un libro cuando pude oler su fragancia tan única, la miré sentarse justo en la mesa en la que yo estaba, así que solo me quedé observando, ella tomó el libro que ya estaba ahí cuando yo llegué y comenzó a leerlo, me estaba volviendo loco, me acerqué con cuidado pero no logré ser silencioso y ella volteo asustada, me miró y pude ver su cara de decepción, ¿A quien esperaba?, junte mis cosas para irme y ella me mostró un libro, —No es mío, ya estaba aquí cuando llegué— dije sin darle mucha importancia, Ella regresó a lo suyo, debía irme pero me mataba la curiosidad por saber quién era ella y por qué carajos me llamaba tanto la atención, Pero mientras más hablábamos más frustrado me sentía, era una chica impulsiva, eso lo podía ver, y no parecía interesada en mí, tuvimos una pequeña discusión, no se por que yo la trataba de ese modo, tal vez era por qué ella me parecía un poco irritante y a la vez me divertía el modo en que reaccionaba, la seguí hasta la salida y accidentalmente tropezó, estaba apunto de caer de cara al suelo, fui más rápido y la sujeté de la cintura, tenerla tan cerca me hacía sentir deseoso de ella, con Roxanne nunca tuve ese sentimiento, cuando ella tocó mi mano lo supe en ese instante, era ella, ella era mi Alfa, y ya se había formado un vínculo entre nosotros, había esperado por ella por casi 50 años y ahora estaba aquí, parecía un poco perturbada, ¿Tanto le desagradaba yo?, se fue y me quedé muy pensativo, esto era increíble, ahora comprendía todo, De todas en el mundo me había tocado la más imprudente y grosera, no tenía clase, ni siquiera era lista, pero era bonita, tenía una linda sonrisa y un hermoso cabello, tenía bonitos ojos, “basta Alec deja de pensar estupideces” , fui directo a casa donde mi madre me esperaba, —¿Qué ocurre?—pregunté con indiferencia y me senté en el sofá de la sala, mi madre no había dejado de llamarme, y ahora que la veía tenía un semblante extraño, —Escuché que Roxanne llegará la semana que viene, su madre me habló y dijo que el matrimonio con Erick no funcionó, viene por ti— —¿Y a mí que?— —Alec, ¿Estarás bien si ella viene?— —Ella ya no es virgen, no puedo tomarla en serio, si se quiere divertir, estoy dispuesto a complacerla, pero nada más, además…encontré a mi Alfa— Mi madre me miró con los ojos bien abiertos y pestañeo varias veces, —¿Estás Seguro?, ¿Cómo es?, ¿Es bonita?, ¿Es amable?, ¿Dónde la encontraste?...sabes que, invítala a cenar esta noche, quiero conocerla— —Ni siquiera yo la conozco mamá— —Pues por eso mismo Alec, invítala— —¿Qué invite a quien?—mi padre venía del estudio con algunos papeles en las manos, me miró y esperó una respuesta de mi parte, mi madre fue la que habló, —Encontró a su Alfa— —Pues espero que esta vez si la hagas tuya y no se vaya con un idiota don nadie como la última, en seis meses Kevin y tú se enfrentarán para tomar el mando del clan Barone y por supuesto espero que ganes, la unión con tu Alfa te hace más fuerte te completa, así que date prisa y no pierdas el tiempo, mientras más rápido te unas a ella será mucho mejor— —¿Qué esperas Alec?, Ve por ella, tráela aquí—ordenó mi madre, no quería ir a rogarle a esa chica tan testaruda, pero por otro lado ansiaba verla, era como si algo me faltase los últimos diez años y ahora lo había encontrado, tenía esa necesidad de estar con ella. Llegué a su casa y no tardé en conseguir su número de teléfono, marqué y ella contestó casi de inmediato, —Te invito a salir— —¿Quién habla?— —Soy Alec, Alec Barone— Hubo un silencio y luego ella dijo, —Lo siento creo que está equivocado no conozco a nadie con ese nombre— Terminó la llamada y yo solo sonreí, esta mujer en verdad quería volverme loco, marqué una vez más y no hubo respuesta, fui hasta la puerta y toqué, una mujer como de 40 años abrió y me miró de pies a cabeza. —Buenas noches, disculpa soy Alec Barone, estoy buscando a tu hermana Megan, vamos juntos en el instituto Whittell—dije tratando de ser gentil, la mujer río avergonzada y se ruborizó un poco, —No es mi hermana, es mi hija pero, pasa, le pediré que baje— —Gracias— Entre a la casa y el olor de ella estaba por todo el lugar, podía saber dónde pasaba la mayor parte del tiempo, me sentía tan relajado, miré a un hombre sentado en el sofá, ese debía ser el padre, me miró y entrecerró los ojos, —Buenas noches— —Buenas noches señor— —¿Eres amigo de Megan? — preguntó Mientras me examinaba, —Si, nos conocimos en el instituto—miré el periódico que leía, parecía un hombre serio, miré a mi alrededor y noté que al hombre le gustaba la pesca, —¿Le gusta pescar señor?— pregunté con cautela, —Si, pero tuve que vender todas mis cañas de pesca al mudarnos— dijo el hombre con un poco de pena, —Ya veo, mi padre solía pescar mucho, pero su trabajo ya no le deja tiempo para hacerlo, la semana pasada sacó todas sus cosas de pesca, planeaba llevarlas mañana a la recicladora, lo que es una pena ya que todo está en perfecto estado, tirará una St.Croix y una Penn, pero si a usted le interesa puedo obsequiárselas, no quiero ser grosero— —U…una…una St.Croix….¿Tirará una st.Croix?—preguntó sorprendido, —Si, se lo dije es una pena— —Con gusto las aceptaré— —¿De verdad?, Entonces las traeré aquí mañana temprano— —Si, pero que mi esposa no se entere, se pone algo loca con las cosas caras— Yo solo sonreí y asentí, ya veo de quien sacó el carácter Megan, mientras hablaba con su padre podía escuchar todo lo que Megan decía, me llamó violador, ¿Cuándo había tratado de violarla?, Sentí ganas de golpearla y hacerla pedirme perdón, le tendría que enseñar a respetarme, —Querido lo siento, Megan está un poco cansada—dijo su madre un poco apenada al bajar las escaleras, —¿Puedo subir a verla?, Es algo realmente urgente— —Si adelante— dijo su padre muy amable, su madre también me dio su aprobación y subí hasta llegar a la puerta que me indicó su mamá, toqué antes de entrar y miré un bulto en la cama. —¿Con que un violador hee?, Nunca antes se habían referido así de mi, ¿Cómo debería castigarte?—en verdad quería castigarla, se quitó la colcha de encima y miré su hermoso rostro y su cabello enmarañado, extrañamente se veía perfecta para mi. —Te doy quince minutos para que te alistes, no me hagas subir de nuevo—advertí antes de salir, se estaba poniendo un poco histérica, así que decidí darle tiempo para procesar la situación. Bajé hasta donde estaban sus padres y ambos me miraron expectantes, —¿Está bien si llevo a Megan a una cena en mi casa?, Prometo cuidarla— La madre me miró y pensé por un instante que iba a llorar o algo, ella era…oh…si ella era… . —Si, adelante— dijo el padre de Megan, —Gracias señor…— —Marco, Marco Anderson— —Señor Anderson, cuidaré bien de su hija— La madre de Megan me miraba de un modo que me hacía sentir incómodo, se veía pensativa e ilusionada, tenía una buena plática con el señor Anderson hasta que por fin bajó Megan, usaba una sudadera y unos pantalones casuales, no había nada fuera de lo común en ella, pero debido al vínculo que formamos me sentía sumamente atraído, tenía ganas de tocarla, y cada movimiento que hacía me parecía exquisito, sus mejillas estaban sonrojadas y constantemente mordía su labio inferior demostrando lo nerviosa que estaba, fuimos afuera y ella estaba reacia a querer ir conmigo, tuve que meterla al auto a la fuerza. Mientras íbamos a mi casa Megan me miraba de reojo, debo de admitir que fui muy poco ortodoxo con ella, ¿pero como debía de explicarle la situación?, ¿Cómo debía cortejarla si era tan testaruda?, además, parecía que no sabía nada sobre los lobos, me hacía ponía las cosas muy difíciles. Ella comenzó a gritar por auxilio y tuve que frenar el auto de golpe, su frente golpeó contra el tablero y para mí sorpresa comenzó a llorar como una niña pequeña, creo que fui muy malo con ella, trataba de calmarla pero ella lloraba cada vez más fuerte, estaba empezando a preocuparme por ella, tenía esas ganas de protegerla y cuidarla, me estaba poniendo muy ansioso. —¿Por qué me secuestraste?— Preguntó con sus ojos llorosos y su blanca nariz enrojecida, —No te secuestré, ya te lo dije, mis padres quieren conocerte y eso es todo, deja de llorar…por favor— dije con un tono más gentil, ella me miró con sus hermosos ojos y para mí sorpresa funcionó, por fin se calmó y sonrió, Se veía muy sorprendida por la zona en la que vivíamos, un lugar lejos de la civilización era mejor, evitábamos problemas con los humanos, aunque nos mezclábamos con ellos y con sus vidas cotidianas, la dejé entrar en mi casa y antes de cruzar el umbral, pude notar un aroma no muy lejos, “maldita sea” pensé y cerré la puerta, mientras esperábamos en la sala, le mandé un mensaje a Néstor, uno de los vigilantes, «Kevin está cerca, ocúpate de él» «Si señor» respondió Néstor, ¿Por qué mierda estaba ese imbécil aquí?, Segúramente había visto a Megan, tal vez él ya sabía que ella era mi Alfa y quería eliminarla, Mi madre llegó y sonrió al ver a Megan, y para mí sorpresa Megan se comportó muy amable, ¿Por qué no podía ser así conmigo?, estaba empezando a ponerme de mal humor, La cena fue muy tranquila, mi madre conversaba con ella y yo prefería no hablar, temía que termináramos peleando, me sorprendí mucho al saber que ella había estado en coma, y yo que creí que era tonta y por eso había perdido dos años de estudios, me sentí muy mal, —Alec te puede ayudar, él es muy inteligente, tiene las mejores notas de su clase— Ella por supuesto se rehusó a aceptar mi ayuda, ya me lo esperaba pero ¿Por qué me sentía tan rechazado?, …........ Después de la cena fuimos a la sala, mis padres le habían dado vino a la pobre chica indefensa y parecía algo ebria, tal vez era la primera vez que probaba el vino, mientras mi padre fue a contestar una llamada y mientras Megan fue al baño, mi madre me empezó a cuestionar, —¿Te gusta?, ¿Qué te parece?— la curiosidad de mi madre a veces me exasperaba, —No es mi tipo de mujer— Mi madre me miró como si yo fuera un estúpido y dijo, —Ella es muy bonita, deberías intentarlo aunque sea— —Ella no me gusta mamá, mi pareja es Roxanne, Megan no es ni la mitad de lo que Roxanne es— —Alec eres un tonto, Roxanne se entregó a otro ya no es pura, jamás será aceptada como un Alfa y lo sabes, ¿y que tiene de especial?, ¿Qué crees que pensará tu padre?— —Con ella o sin ella seré el nuevo líder, no dejaré que me quiten ése derecho— Había dicho aquello sin pensar, yo solo no quería aceptar que ella si me gustaba y que me atraía, no quería sentirme tan ridículo delante de mi madre, sabía que me pondría en vergüenza delante de Megan y no quería eso. Escuchamos a mi padre y a Megan hablar en el pasillo y fuimos a ver que ocurría, Megan se miraba confundida, mi padre me ordenó llevarla a casa, ella estaba ebria sin duda, Salimos de la casa y Megan tropezó de nuevo, la sujeté con fuerza y sentí su delicado cuerpo junto al mío, su aroma tan embriagante inundaba mi nariz, no pude evitarlo más, besé sus tiernos labios y ella está vez no se resistió, yo quería ir más allá, quería tocarla y besar todo su cuerpo, me sentía tan excitado por esa pequeña joven, pero ella me alejó y puso cara de asco. ▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️ LAS COSAS MAS BELLAS DE ESTE MUNDO NO PUEDEN SER VISTAS O INCLUSO ESCUCHADAS; DEBEN SER SENTIDAS CON EL CORAZÓN…. HELLEN KELLER..
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