John seguía revisando la información que tenía disponible. Quería ver si lograba encontrar un indicio de las posibles identidades de las víctimas que tenían ya acumuladas. Sin embargo, toda la información indicaba a que fue culpa de los operarios de ese día y más de la persona que los comandó, Anatoli Diátlov. Pero si esto era así, entonces no había sentido alguno de que este asesino atacara en Londres. Había información clave que faltaba y que claramente estaba siendo ocultada por fines políticos.
Tras unas horas de romperse la cabeza estudiando una y otra vez la evidencia, se acercó al Capitán Brown. Quería ver si él había hecho algún progreso. Sin embargo, al casi llegar a la oficina pudo escuchar voces. Tenues, pero logró esconderse lo suficientemente cerca para escuchar lo que decían
