John estaba recopilando toda la información que tenía para salir de la estación de policía y dirigirse al departamento de Kreves cuando el Capitán Brown entró a su oficina. Pudo ver en el rostro del capitán todo el cansancio y la frustración acumulada por los últimos días de investigación incesante. Sin dirigirle una palabra caminó hacía la ventana, miró durante unos minutos, regresó al escritorio de John donde tomó asiento, alzó su mirada y le dijo:
- Se que al igual que yo te sientes culpable de que Kreves se encuentre fuera del caso, pero tienes que entender que es por su propio bien. Por eso vine, para pedirte que no lo busques. Deja que permanezca solo hasta que terminemos con este caso, es la única forma en la que realmente se encuentra seguro, no solo de ese asesino, también de sí
