Comenzaremos esta historia como generalmente inician las grandes tragedias, con una mezcla entre un hombre sediento de poder y otra ingenua que funciona como marioneta. Es un combinación perfecta y catastrófica, en especial cuando ninguno es consciente de su verdadero papel. Sabes, un error que cometemos los seres humanos es creer que somos el centro del universo, que nadie más se encuentra sobre nosotros y que nuestras acciones realmente son por libertad o deseo. – realizó una pausa larga, miró por unos minutos hacia el suelo, Kreves hasta cierto punto sentía compasión por aquella figura, hasta que levantó la mirada y pudo ver la sonrisa macabra que se había posado en sus labios. – No podríamos estar más alejados de la verdad, y es que todos, absolutamente todos somos marionetas. Víktor