La noche de navidad volvió a ser un tema actual. La mente de Jorge era un caos, durante un largo tiempo repasó todo lo que sabía del infarto que sufrió su abuelo y la investigación del tío Iván. Después miró a Sarah, culpándola en silencio por no decirle al resto de la familia sobre la identidad de su prometido. Él la abandonó y ella lo dejó seguir siendo el chofer de su padre, como si lo que le hizo no fuera trascendental. – No te entiendo – pensó en voz alta, mirando a Sarah. Víctor se levantó – ya es suficiente. Se equivocó, lo sabe, pero nos dijo lo más importante y tú solo la atacas. Eres su maldito hermano, compórtate como tal. Frente a esas palabras, Jorge negó con la cabeza y salió de la habitación. Víctor ya esperaba esa respuesta, acomodó la silla que estaba junto a Sarah y

