Apago el despertador con sopor y me levanto con pesadez. Ya siento que va a ser un día muy largo y del que no voy a poder escaparme muy rápido. Me doy una ducha refrescante y tranquila para calmar mis nervios, tengo tiempo porque hoy va a pasarme a buscar Alejandro a las diez para ir al bazar, así que me visto con un vestido largo y veraniego, con colores llamativos, y luego me preparo una taza de té de manzanilla. No sé porqué estoy tan nerviosa… bueno, sí, porque voy a tener que estar sola con Blackstar, de nuevo. Se ofreció a llevarme a buscar la cortina y los muebles que tengo pensado comprar, y eso me pone ansiosa. No quiero que piense que acepto su propuesta ni tampoco quiero que los periodistas nos sigan y saquen fotos de nosotros juntos. Para colmo no pude dormir para nada de