Las campanas que sonaban en todo el pueblo comenzaron a darle la bienvenida a un nuevo día. Jade no logró dormir en toda la noche por los nervios que su cuerpo la estaban haciendo sentir. Volteó su cabeza hacía la derecha para poder observar a un Sean completamente dormido. Sonrió al verlo respirar de una forma tan relajante, por lo que sin hacer mucho ruido se bajo de la cama para poder ir a darse una ducha.
El sueño de Sean se vio interrumpido cuando el agua comenzó a caer en las baldosas de su baño. Al no ver a Jade a un lado suyo, supo el por qué escuchaba el impacto de las gotas de agua. De un momento a otro el teléfono del susodicho comenzó a sonar, por lo que agarró su teléfono para contestar la llamada.
— Alejandra irá a tu casa en media hora para preparar a Jade — El empresari
