CAPÍTULO 59 IKER Danielita estuvo en observación, la misma enfermera que me cuidó, también estuvo a su lado. En un momento vendrá la doctora, para ver cómo va nuestro bebé, depende de lo que diga nos iremos a casa. Entro a la habitación, y saludo a Viry, me esboza una sonrisa. Me acerco a Danielita, beso sus labios. —¿Cómo te sientes? —Ya mejor. Nos damos una suave sonrisa. Beso, su frente. Viridiana se despide, pues debe ir a ver a sus demás pacientes, hace poco que entró a trabajar en este hospital, me hubiera gustado que fuera su doctora, pero no se pudo, ya que ella es pediatra, ella será la que revisará a nuestro bebé. Me acomodo a su lado, Danielita, me abraza, dejo un cálido beso en su mejilla y en sus labios. No me he querido despejar de su lado, mi mamá s